Nacido en Uruguay, este precoz escritor y periodista ya vendió su primera tira cómica al semanario "El sol" con solo 14 años, pero no fue hasta el año 1960 que comenzó su carrera profesional como editor de "Marcha". Desde entonces Galeano no ha parado de escribir artículos y libros y de participar activamente en la política de su país y de otros países de América Latina. Amigo de Mario Vargas Llosa y Mario Benedetti siempre ha estado de lado de los desfavorecidos, de los oprimidos y en contra de cualquier tipo de dictadura, real, o sumergida. En ningún momento hasta el día de hoy, este autor, ha dejado de mojarse, de involucrarse en lo que lo rodeaba. Palabras y palabras siempre comprometidas con lo social que le han llevado a ganar los premios literarios mas importantes del mundo; el más reciente, el Stig Dagerman, que más o menos es el equivalente al premio novel de literatura. Entre sus obras más famosas destacan "Memoria del fuego" y tal vez su mejor obra "Las venas abiertas de América Latina" que escribió (y fue prohibido) poco antes de ser exiliado de Uruguay en 1973.
Mirando la vida de Eduardo Galeano me surge un debate. ¿Debe un artista estar comprometido con su tiempo? ¿Debe expresar su opinión política? ¿Debe involucrarse en un cambio social en el que el crea y pueda hacer de este mundo un sitio mejor? ¿El artista que opta por no hacerlo y solo intenta entretener o emocionar no es un artista de verdad? ¿Donde esta el limite entre el arte y la política? En su ultimo libro publicado hasta la fecha "Los hijos de los días", Galeano repasa durante un año, día a día, los momentos históricos que el considera importantes, pero desde su punto de vista político y nada objetivo. Viniendo de un periodista no deja de sorprender, pero ¿y si mereciera la pena? Es decir, puedes o no estar de acuerdo con su punto de vista, pero ¿no es tan bueno leer algo con lo que no estas de acuerdo como leer algo que compartes? Eso, desde luego, también afianza tu opinión. Ante cualquier estimulo siempre hay una reacción, y en esa reacción defines tu humanidad, esconderla es negar tu condición humana, negarla y tener miedo a expresarla es un error porque hace de esta realidad una realidad gris, sin colores. Luego puedes elegir tu color de todos los que ves, o incluso cambiar el tuyo durante los años. Todo vale mientras seas fiel a tu opinión.
Exprésate, comprométete contigo mismo, se coherente con tus valores, sin miedo, sin represión y sin la censura del "que dirán". Puede que tu opinión vaya en contra de gente como Galeano, puedo que no; pero en eso radica la belleza de la vida. Un artista como el, que ha sobrevivido a la cárcel, el exilio y un cáncer de pulmón bien merece el respeto de toda la humanidad. Te guste o no su militancia social, aceptes o no su criterio. Galeano ha brillado con luz propia por no dejar de ser el en todo lo que hace. Dime ¿eres tu en todo lo que haces?
Gabriel Córdoba.
Novenoarte.
