domingo, 19 de mayo de 2013

1. Sindrome de Stendhal.

Gabriel Cordoba / FOTO: Fake Design  

Tengo 34 años mientras escribo esto y no pienso mentir.

No recuerdo ni un solo momento en mi vida que no haya sentido algo que late entre mis pulmones, justo encima de mi estomago. Es como una piedra volcánica que aun no ha terminado de apagarse. Me impide relajarme, disfrutar del paisaje, me obliga a estar en continuo contacto con lo que me rodea.

Hablo de la PASIÓN por el arte o cualquier expresión artística que me haga sentir vivo.

Algunas personas me han recomendado la meditación para poder parar este tren de ansia por el conocimiento, por las historias ajenas, por sentir cada cosa que me rodea, pero eso no va conmigo. ¿Desapegarme de las cosas para verlas desde fuera, sin emoción, sin sufrir, sin reír? ¡De ninguna manera! Yo nací para vivirlo todo intensamente. Separarse del mundo para analizarlo es como ver una película y estudiarla en lugar de disfrutarla. Eso no es vida. Eso es ser un témpano de hielo ante el dolor ajeno, ante la gente perdida. Es saberse mas listo y equilibrado que las pobres almas que buscan la felicidad, cuando para mi estar perdido y buscar la salida a base de risas, llanto y experiencias es la felicidad en si.

Sea a través de un libro, un film, una obra de teatro, una historia ante una infusión, un cruce de miradas fugaz en el metro o un simple paisaje no puedo desconectar de vivir. Abrumado entre tanta belleza como Stendhal en la Basílica de la Santa Cruz de Florencia. Y mi compromiso con esta realidad de la que soy incapaz de escapar es cada vez mayor. Tanto es así que he decidido convertirme en divulgador artístico. Un blog, un canal de youtube y una pagina de facebook serán mis primeras plataformas.

Libros que leer, películas que ver, obras que contemplar, teatro al que asistir. Todo en este formato multimedia. En definitiva, ansia por el saber. Un conocimiento a través de las emociones que nos hace seres mas completos, mas implicados con nuestra realidad, mas compasivos, mas inteligentes, mejores personas... y de paso este mundo, también es un poco mejor.

No diré que el viaje hacia la pasión es fácil y siempre divertido. No diré que todo el mundo lo entenderá. No diré que no duele. Solo diré que merece la pena.

Dame la mano ¿Te vienes?

5 comentarios:

  1. Estoy ansiosa por leerte!! estoy convencida de que tienes tanto que decir en ese sentido... me encantará saber tu visión y perspectiva acerca de todos los libros, películas, obras de teatro y demás que se crucen en tu vida. Lo que no sé es por qué no has empezado antes!!!

    ResponderEliminar
  2. Hola Compañero,

    seguiré tu blog, y demás plataformas, eres una persona muy interesante. Comparto contigo todo lo que has dicho, en este, tu primer post. La pasión es vital en mi vida, es la gasolina de mi motor, sin ella solo camino triste hacia ningún lado. Siempre gusta encontrarse uno con sus iguales.

    te doy la mano cibernetica!

    Un saludo

    ResponderEliminar
  3. Seguiremos tu viaje hacia la pasión.

    ResponderEliminar
  4. Abandonémonos a la belleza y seamos partícipes del arte que nos rodea, como un "compromiso con la realidad". Es genial.
    Tus palabras derrochan pasión y la contagias. Que bonita manera de escribir.

    Te acompaño!

    ResponderEliminar
  5. También seguiremos tu blog, un abrazo.

    ResponderEliminar